DFSK 500, MÁS MADERA PARA LOS SUV COMPACTOS

Como el mercado de los SUV compactos empieza a estar saturado, DFSK no se anda con rodeos y muestra desde el principio sus principales armas: el precio, 18.495 euros; y un dato, que diría la ministra, hablamos del coche automático más barato de nuestro mercado. Y todo ello aderezado con una de las mejores garantías del mercado (hasta siete años) y un equipamiento muy completo.

Diseño y habitabilidad

Con un diseño ‘hecho en casa’, en el Design Center de la propia compañía china, no hace falta mirar el tamaño para saber que estamos ante uno de los modelos que más se ven ahora en nuestro mercado: un SUV compacto. Según la compañía, las proporciones del DFSK 500 son las de cualquier modelo SUV premium, con una línea muy aerodinámica, con enormes entradas frontales de aire y un spoiler posterior que resalta el efecto flotante del techo. Y aunque hablemos de un todocamino, o presunto SUV, se ha colocado el centro de gravedad lo más bajo posible para agilizar la marcha que se utilizará en un porcentaje de casi el total de su conducción: en carretera.

Porque el DFSK no se aparta de las tendencias del mercado y apuesta todo… a la habitabilidad. Por ello, el poderoso diseño exterior no busca, que también, dotar al vehículo de un volumen más que necesario para convertirlo en un ‘gran coche’, sino que mira sobre todo por la comodidad de sus cinco ocupantes. De esta forma, la distancia entre ejes de 2,65 metros ofrece uno de los espacios más habitables de su segmento. Y no solo a lo largo, sino a lo ancha, con unos notables 1,50 metros en la parte delantera y tan solo dos centímetros menos en la trasera. Allá atrás, el espacio para las piernas de los pasajeros alcanza los 82 centímetros, con un piso, además, completamente plano.

En el interior la comodidad no solo se logra a través de la habitabilidad, pues se busca una buena experiencia de viaje con un dedicado trabajo de insonorización y mucho mimo en los detalles, como el mullido antifatiga de doble densidad de los asientos o la medida de confort sonoro al ralentí. El resultado, de tan solo 39 decibelios, no envidia nada al obtenido por alguna berlina alemana premium. Desde siempre, en DFSK han dedicado tiempo, personal y esfuerzo a conseguir que sus modelos sean los menos contaminados acústicamente.

Un motor ya conocido

El propulsor del DFSK 500 es ya un conocido atmosférico de cuatro cilindros en línea con 1.498 centímetros cúbicos y 106 caballos de potencia máxima a 6.000 r.p.m. Alcanza una cifra de par de 148 Nm, lo que asegura una conducción relajada, pero con una reserva de ‘ímpetu’ siempre preparada por si hiciera falta.

Y, lo que nos congratula mucho, DFSK no ha tirado por el retrete la tecnología de gas, que tanto están defenestrando, sin sentido, la mayoría de las marcas. De esta forma, dicho motor 1.5 del DFSK 500 se puede adaptar con toda facilidad para su uso con gas licuado de petróleo (GLP) como combustible alternativo. ¿Ventajas de este ‘tuneo’ de fábrica? Una autonomía, entre la gasolina y el GLP, de más de 1.100 kilómetros, una notable reducción del coste por kilómetro y la tan ansiado etiqueta ECO de la DGT.

Dos niveles de acabado

El nuevo DFSK 500 llega al mercado español con dos niveles de acabado: Luxury e Intelligent. Con funciones y aparatitos de serie como el acceso sin llave, arranque por botón, climatizador, cámara de visión trasera de ayuda al aparcamiento, freno de mano eléctrico, ordenador de viaje, control de la velocidad de crucero o tapicería de ecocuero.

En cuanto al precio, el nuevo DFSK 500, con dos terminaciones y cinco colores de carrocería, arranca en los 18.495 euros en la versión Luxury.