BENZ PATENT-MOTORWAGEN NUMMER 1: NACE EL AUTOMÓVIL EN 1886
#TalDíaComoHoy, el 29 de enero de 1886, Karl Benz, un ingeniero e inventor alemán, presentó en la Oficina Imperial de Patentes de Alemania la solicitud de registro para un revolucionario invento: el Benz Patent-Motorwagen Nummer 1.
Este vehículo de tres ruedas, impulsado por un motor de combustión interna monocilíndrico de cuatro tiempos, sentó las bases de lo que hoy conocemos como el automóvil. La patente, registrada con el número 37435, no solo representó un hito tecnológico, sino que también marcó el inicio de una nueva era en el transporte y la sociedad.
La historia en movimiento del primer automóvil
El invento: diseño y funcionamiento
El Benz Patent-Motorwagen Nummer 1 era un vehículo de tres ruedas con un diseño radicalmente diferente a los carruajes tradicionales. Se trataba de una estructura ligera de acero con ruedas de radios similares a las de una bicicleta, recubiertas de caucho macizo. Su chasis estaba diseñado para soportar el peso del motor y los pasajeros sin comprometer la estabilidad.
El corazón de este vehículo era su motor monocilíndrico de cuatro tiempos, con una cilindrada de 954 cm³, capaz de producir 0,75 caballos de potencia (0,55 kW) a 400 revoluciones por minuto. Este motor estaba refrigerado por evaporación, y su carburador permitía la alimentación con ligroína, un derivado del petróleo similar a la gasolina.
La transmisión era de correa y cadena, lo que permitía trasladar la potencia del motor a la rueda trasera. Contaba con un sistema de encendido eléctrico primitivo, que utilizaba una chispa para inflamar la mezcla de aire y combustible dentro del cilindro.
El sistema de dirección consistía en una barra articulada conectada a la rueda delantera, y los frenos eran de bloqueo de madera, operados manualmente mediante una palanca.
Karl Benz y la visión del automóvil autónomo
Karl Benz, nacido en 1844 en Karlsruhe, Alemania, era un ingeniero apasionado por la mecánica. En 1871, fundó junto con su esposa, Bertha Benz, la empresa Benz & Cie., dedicada inicialmente a la fabricación de motores estacionarios. Sin embargo, Benz tenía un sueño más ambicioso: crear un vehículo que no dependiera de caballos (vivos) para su desplazamiento.
Su inspiración provino de los avances en motores de combustión interna desarrollados por Nikolaus Otto, Gottlieb Daimler y Wilhelm Maybach. Mientras Daimler y Maybach trabajaban en un motor liviano adaptable a carruajes, Benz decidió diseñar desde cero un vehículo que integrara motor y chasis en una única unidad.
El impacto en la sociedad de 1886
En 1886, la sociedad aún dependía de los carruajes de caballos para la movilidad urbana y rural. La idea de un vehículo autopropulsado era vista con escepticismo. El motor de combustión interna era una tecnología en desarrollo, y la mayoría de las personas no imaginaban su aplicación en el transporte cotidiano.
Bertha Benz, el primer conductor o conductora de la historia del automóvil
Sin embargo, el Patent-Motorwagen demostró que la autonomía del transporte personal era posible. Bertha Benz, esposa y socia de Karl, fue clave para la popularización del invento. En 1888, sin informar a su marido, emprendió un viaje de más de 106 kilómetros desde Mannheim hasta Pforzheim en una versión mejorada del Motorwagen (Modelo III, con 1,5 caballos de potencia). Durante el trayecto, Bertha se enfrentó a numerosos desafíos, como la falta de combustible, problemas mecánicos y la necesidad de encontrar soluciones improvisadas, como usar un alfiler de sombrero para limpiar el carburador obstruido. También compró combustible en una farmacia en Wiesloch, considerada la primera gasolinera del mundo.
Su hazaña no solo probó la viabilidad del automóvil, sino que también despertó el interés del público y atrajo a los primeros inversionistas.
Desafíos y competencia
El Benz Patent-Motorwagen no fue el único intento de motorización del transporte en la época. Gottlieb Daimler y Wilhelm Maybach trabajaban paralelamente en su propio vehículo motorizado, aunque su enfoque se basaba en la adaptación de un motor a un carruaje tradicional. En 1926, las empresas de Benz y Daimler se fusionarían para dar origen a Mercedes-Benz, consolidando la industria automotriz alemana.
A nivel internacional otras naciones comenzaron a experimentar con la motorización. En Francia, Armand Peugeot y Émile Levassor impulsaron el desarrollo de vehículos basados en el motor de combustión interna, mientras que en Estados Unidos Henry Ford llevaría la producción masiva de automóviles a otro nivel a principios del siglo XX.
El legado del Benz Patent-Motorwagen
El Benz Patent-Motorwagen Nummer 1 es considerado el primer automóvil de la historia, ya que fue el primer vehículo diseñado y construido específicamente para ser propulsado por un motor de combustión interna. Su invención marcó el inicio de la industria automotriz y el cambio en la movilidad humana.
Hoy, el legado de Karl Benz sigue vigente en la ingeniería automotriz. El Museo Mercedes-Benz en Stuttgart alberga una réplica funcional del Patent-Motorwagen, y cada año se celebra la ruta de Bertha Benz como homenaje a su histórico viaje. El automóvil pasó de ser una curiosidad mecánica a convertirse en una necesidad global, transformando ciudades, economías y estilos de vida.
En retrospectiva, la patente 37.435 fue más que un simple documento: fue la semilla de una revolución tecnológica que aún sigue evolucionando con los avances en vehículos eléctricos, autónomos y de hidrógeno. Karl y Bertha Benz no solo crearon un invento, sino que dieron el primer paso hacia un futuro donde la movilidad sigue reinventándose. Imágenes de la réplica: Collecting Cars.