Después de una espera corta, pero intensa, parece que por fin veremos por nuestras calles una superberlina eléctrica que tiene mucho que toserle a Tesla: el Lucid Air.
El espectacular frontal del Lucid Air es lo primero que entra por el ojo
Una aerodinámica espectacular, un diseño minimalista pero futurista en el que apenas se distinguen los grupos ópticos, enterrados bajo una línea que rodea el frontal del modelo, una enorme pantalla interior de ¡34 pulgadas! y 5K de resolución frente al conductor, un impresionante techo de cristal que suma centímetros cúbicos virtuales a un interior ya de por sí generoso, 739 litros de maletero, nivel 2 de conducción autónoma…
El interior del Lucid Air sigue la línea minimalista de su exterior
Todas estas cualidades y equipamientos ya son de por sí seductores, pero no son nada comparados con las mecánicas que ofrece el Lucid Air. Dos propulsiones: una, la ‘lenta’ con un único motor eléctrico en el eje trasero; la otra, la ‘menos lenta’, que suma otro motor en el eje delantero, con lo que alcanza la tracción total. La primera alcanza los 933 caballos, pero es que la segunda llega… ¡a los 1.111 CV! Esto sí seduce, y mucho.
Y hablamos de un coche eléctrico, que no se nos olvide. Por lo que nos tenemos que referir también a la carga. En todas sus versiones, el sistema eléctrico del Air es de 924 voltios, bastante más que el Porsche Taycan, con un nivel de carga de 300 kilovatios, por lo que es posible recargar a un ritmo de 32 kilómetros de autonomía por minuto. La electrificación del futuro.
El enorme techo de cristal provee de un gran espacio virtual al Lucid Air
Por lo que vemos, Lucid llega con ganas, y con armas, de montarle una batalla, sino una guerra, a Elon Musk, ahora que está más pendiente de Twitter. Lo que llamaríamos un sorpasso desde arriba, comiéndose a Tesla, y a las emergentes marcas de lujo electrificadas, en diseño, en motores, en prestaciones pero sobre todo en un áurea que podemos percibir solo con mirar las imágenes del modelo.
Como ya hemos dicho, el Lucid Air, que hasta finales del año pasado solo estaba disponible en Estados Unidos, y a unos precios muy competitivos, entre 65.000 y 120.000 euros. Sin embargo, no se espera que, en su inminente llegada a Europa (España incluida), baje ninguna versión de los 100.000 euros. Estaremos muy atentos…