En marcha
El motor es el corazón de todo GTI, y este no es ninguna excepción. El nuevo Polo GTI es la primera generación en alcanzar los 200 CV de potencia. El Polo GTI equipa un motor de inyección directa 2.0 TSI, que desarrolla 8 CV más que el 1.8 TSI de 192 CV de su predecesor. Alcanza un par máximo de 320 Nm a partir de las 1.500 rpm, que permite una experiencia de conducción extremadamente deportiva. El motor se combina con una caja de cambios DSG de 6 velocidades, con una versión manual prevista para el próximo año.
El modelo incorpora la tecnología más avanzada en materia de asistencia a la conducción y conectividad que mejoran el confort y la seguridad a bordo, como es el caso del sistema de vigilancia Front Assist con frenada de emergencia en ciudad y detección de peatones, el sensor de ángulo muerto, la protección de ocupantes proactiva, el Control de Crucero Adaptativo (ACC), la función Park Assist y el Selector de Modos de Conducción, entre otros, que hacen que la experiencia de conducción sea más cómoda que nunca.
Al igual que el Golf, el Touran, el Tiguan, el Passat y el Arteon, el Polo se basa ahora también en la plataforma modular transversal (MQB). En este caso se trata de la versión A0, adaptada para modelos especialmente compactos. La plataforma MQB A0 trae consigo todo un arsenal de ventajas. Lo primero que salta a la vista son sus atractivas proporciones, que el equipo de diseño también ha aprovechado en este caso como ventaja para lograr un aspecto muy dinámico. Literalmente debajo de la chapa se esconden las ventajas técnicas de la MQB, como una construcción optimizada, una mayor rigidez de la carrocería, excelentes prestaciones en caso de colisión y, a pesar de los añadidos en cuanto a tamaño y seguridad, un peso constante de la carrocería.
La influencia positiva de la MQB A0 en las proporciones y en el diseño en general es enorme: las batallas, la longitud exterior y la anchura del Polo han crecido mientras que su altura es prácticamente idéntica. Gracias a esto se crean unas proporciones muy dinámicas y una silueta notablemente más alargada. El equipo de diseño aprovechó la nueva estructuración de las dimensiones para montar un Polo más deportivo, potente, fresco y masculino sobre grandes llantas de hasta 18 pulgadas.