Dacia busca seguir creciendo y, para ello, ha preparado pequeñas novedades para 2017. Las más relevantes, un nuevo motor gasolina de tres cilindros y 75 CV para el Sandero y el Logan, y un cambio de doble embrague para el Duster.
Además de los cambios que acaparan todos los titulares, Dacia aprovecha para renovar, prácticamente, toda su gama, ofreciendo al comprador, sin sobrecoste, nuevos equipamientos, un look exterior e interior más atractivo, una ergonomía mejorada, así como una mayor percepción de calidad. Así, Sandero, Sandero Stepway, Logan y Logan MCV se revisan en parte de sus elementos, tanto en el interior como en el exterior. Los Dokker, Dokker Van y Lodgy no se quedan atrás y también incluyen novedades.
Quizá la noticia más importante de estos pequeños lavados de cara sea el nuevo motor de gasolina, denominado SCe 75. Este motor económico, moderno y asequible permite ahorrar cerca de un 10% en emisiones de CO2 y en consumo de carburante. Sólo puede rivalizar con esta novedad el hecho de que, por primera vez, Dacia ofrece una caja de cambios automática EDC de doble embrague (Efficient Dual Clutch) en el Duster.
Una renovación moderada pero sustanciosa
En el reciente Salón del Automóvil de París, Dacia presentó la remodelación de cuatro de sus modelos: Sandero y Sandero Stepway y Logan y Logan MCV, con un nuevo diseño más moderno respaldado por una nueva firma luminosa, un nuevo ambiente interior, nuevos espacios guarda-objetos, a un precio prácticamente idéntico. Ahora Dacia integra estas novedades también en Dokker, Dokker Van y Lodgy para que toda su gama tenga el mismo aire de familia.
La oferta de motores y transmisiones se amplía también en los nuevos Sandero, Sandero Stepway, Logan y Logan MCV. Por primera vez, los modelos Dacia se benefician de un motor de gasolina inédito, un SCe 75 moderno y aún más económico. De igual manera, el Duster incorpora a su oferta como gran novedad la caja de velocidades automática de doble embrague Efficient Dual Clutch (EDC), aunque sólo en el motor diesel de 110 CV y tracción 4×2.
En cuanto a las novedades del diseño exterior, la parte delantera de los Sandero, Sandero Stepway, Logan y Logan MCV se ha renovado casi por completo, aunque sólo el observador avezado se dará cuenta en el primer vistazo. Quizá lo más importante de los cambios es una nueva firma luminosa tanto en la parte delantera como en la trasera. Ahora, las nuevas luces diurnas son de LED, más estilizadas y modernas. En la parte delantera, incorporan cuatro bloques rectangulares. Con ello, el frontal de los modelos se ensancha visualmente y su aspecto robusto se refuerza.
También han cambiado los pilotos traseros de los Sandero y Logan con la misma intención, a través de cuatro cuadrados luminosos. Los nuevos paragolpes, la calandra con rejilla de entrada de líneas cromadas y los antiniebla acentúan la sensación de solidez de los cuatro vehículos.
Estas mejoras en el diseño se han adoptado también en el nuevo Sandero Stepway. Este modelo cuenta con una nueva identidad delantera que le acerca al estilo del Duster. Combina los tonos negros del paragolpes con rectángulos cromados en la calandra, lo que proporciona un toque dinámico al frontal del vehículo. La altura con respecto al suelo se ha elevado y las defensas delantera y trasera de cromo satinado y las barras de techo longitudinales completan su aspecto deportivo. En la parte trasera, una cánula de escape cromada acentúa el carácter aventurero del coche.
En el interior, Dacia propone un nuevo ambiente con elementos de cromo satinado en el salpicadero (aireadores, contadores, frontal central, moldura central del volante), los tiradores de puerta y la palanca del cambio. Tenemos también un nuevo volante con cuatro radios que integra el claxon en el centro. En los niveles de acabado superiores, el volante luce un revestimiento exclusivo Soft Feel muy resistente y suave al tacto. También se puede disfrutar de nuevas tapicerías que transmiten una imagen más fresca y confortable.
En cuanto a prestaciones y equipamiento, la gama incorpora nuevas ayudas a la conducción como la cámara de marcha atrás (según versión) y la ayuda al arranque en cuesta. Los elevalunas eléctricos delanteros y traseros se han reubicado y quedan al alcance de la mano en los paneles de las puertas. Además, el conductor dispone de un elevalunas secuencial, más práctico. Y por último, se ha integrado un reposabrazos retráctil en el asiento del conductor (según versiones) que permite acceder mejor a los mandos entre los dos asientos delanteros y reorganizar dicho espacio.
El habitáculo sigue igual de espacioso y es aún más funcional al enriquecerse con nuevos compartimentos guardaobjetos: hueco delantero para el teléfono móvil (en el lateral del asiento del pasajero), un portaobjetos en el lateral de la consola y un nuevo portabotellas en la parte posterior de la consola central. Asimismo, una nueva toma de corriente de 12 voltios permite que los pasajeros traseros carguen sus dispositivos portátiles.
Para completar la renovación del diseño de la gama principal, Dacia comparte algunos elementos de estilo con los Dokker, Dokker Van y Lodgy. Los tres modelos adoptan una nueva calandra delantera con cromados que refuerzan el aspecto robusto de los vehículos. Las versiones Stepway disponen de nuevas ruedas flexwheel Dark Metal y nuevas llantas de aluminio 16’ ALTICA sustituyen a las actualmente disponibles en el resto de la gama.
Por dar algún dato más a propósito del nuevo propulsor, decir que Dacia es la primera marca del grupo en beneficiarse de este motor de gasolina atmosférico, el SCe 75, que se fabrica en Turquía. Este motor de 1,0 litros y tres cilindros que desarrolla 75 caballos y 97 Nm de par, siendo el acceso a gama. Comparado con el motor al que sustituye, permite ahorrar cerca de un 10% en emisiones de CO2 y en consumo de carburante gracias a un reducido peso (20 kg menos gracias a su bloque de aluminio). Su consumo homologado es de 5,2 litros a los 100 km, emite 117 gramos de CO2 por kilómetro y se comercializará en España a principios de 2017.
Junto a esta mecánica, la gama de motores se completa así: en Gasolina, TCe 90 con Stop&Start (S&S), TCe90 S&S GPL y TCe 90 S&S combinado con la caja de velocidades pilotada Easy-R. en Diésel, dCi 75 S&S, dCi 90 S&S combinado con caja de cambios manual o pilotada Easy-R. Por último, toda la gama Dacia está ahora disponible en GPL.
En cuanto a la nueva caja automática EDC de doble embrague del Duster, resulta obvio señalar la obtención de mayor placer de conducción. En doce años, el mercado de las cajas de velocidades automáticas ha pasado, en Europa, de un 6% en 2003 a un 18% en 2015. Con la caja de velocidades EDC (Efficient Dual Clutch), Dacia propone una alternativa a la caja de velocidades manual y se adapta a las expectativas de sus clientes. Duster incorpora esta caja con el motor diésel dCi 110 4×2 S&S.
La transmisión EDC es una caja de velocidades automática de doble embrague y 6 relaciones. Ofrece la comodidad y suavidad de una caja automática, y el ahorro en combustible y las bajas emisiones de CO2 próximos a los de una caja manual. Esta caja de velocidades incorpora la ayuda al arranque en cuesta (HSA, Hill Start Assist).
Antes de pasar a las impresiones de conducción, señalar que el Sandero Base con el motor gasolina de 75 caballos costará 8.400 euros. El GLP 90 sale por 10.730 y en diesel, el cDi de 75 caballos empieza en los 10.330 euros. En cuanto al Logan, el nuevo motor SCe de 75 caballos estará disponible en el acabado más bajo desde 9.180 euros. Por último, señalar que el sobreprecio del Duster de cambio automático representa poco más de 1.100 euros de sobrecoste con respecto al cambio manual y el Logan MCV, a igualdad de motor y equipamiento que el sedan, representa un desembolso de en torno a mil euros en cada caso.
CON LOS NUEVOS SANDERO, LOGAN Y DUSTER POR CROACIA
Cerca de 300 kilómetros, con cuatro vehículos distintos, conforman buena base para hablar con fundamente de la gama Dacia 2017. Revistadelmotor.es ha tomado contacto en esta presentación internacional a la prensa, por este orden, con el Sandero diesel de 90 CV, el Logan con idéntico motor, el Duster 110 con el nuevo cambio automático de doble embrague y el Sandero con el nuevo motor gasolina de tres cilindros y 75 CV.
Hacía escasamente un año que habíamos hecho una prueba en profundidad del Sandero diesel de 90 caballos, y queríamos comprobar los cambios, partiendo de una base más o menos reciente y controlada. La sorpresa es importante, pues a pesar de todo lo que nos han contado en el departamento de comunicación de Dacia, la primera impresión es que salvo los retoques en faros delanteros y pilotos traseros, el resto es prácticamente igual.
Nos hacemos una ruta de cien kilómetros por los alrededores de Sibenik, llegando hasta casi Trogir, cerca de Split, y en esta ruta podemos comprobar de primera mano que si estéticamente los cambios eran pocos, dinámicamente no ha cambiado nada, para bien y para menos bien, con todo lo que conlleva. Sigue siendo un coche muy práctico y habitable, con unas suspensiones tirando a muy cómodas, plástico duro por todas partes en el interior… pero eso sí, todo a un precio inalcanzable para toda la competencia más o menos directa.
La primera mitad del recorrido es algo montañosa, con muchas curvas, y la segunda parte es por una carretera costera con poco tráfico, pero también sinuosa. La media de consumo es más que decente, 6,1 litros para una unidad de prensa que apenas completa 900 kilómetros. La rumorosidad sigue ahí, aunque no será excusa para no comprar un coche que en Dacia saben que está dirigido a hombres, más o menos mayores, con poca preparación escolar y que miran el precio y la practicidad mucho antes que cualquier otra cosa.
En las paradas para elaborar el reportaje gráfico que acompaña a este análisis escrito, nos da por pensar que, con los grupos ópticos traseros tan oscuros, casi parece un coche, en la versión Stepway, deportivo, mucho, casi tuneado, gracias a los cromados de barras y demás defensas inferiores.
Lo mejor, aparte del abundante plástico negro duro, está en el interior, con una habitabilidad fantástica para el tamaño. No nos gusta que el volante no sea regulable en profundidad, algo que pasa en toda la familia Dacia, ya que sólo se regula en altura. En las plazas traseras y en el maletero el espacio está muy aprovechado.
Echamos de menos que los cambios no hayan afectado al cuadro de mandos, tan simple como antes, exactamente. Seguimos sin zona roja en el cuentarrevoluciones –en ningún modelo Dacia aparece- y con un navegador de pantalla táctil de calidad justita, pero al menos hace sus funciones. Hay que pelearse mucho con el zoom para lograr lo que quieres.
El segundo en pasar por nuestras manos es el Dacia Logan con el mismo motor que el Sandero anterior, el diesel de 90 caballos. El pedazo de maletero sigue estando ahí, y tras una preciosa ruta de casi 90 kilómetros que atraviesa el Parque Nacional de Krka, apreciamos que la conducción es muy similar a la del Sandero. Sin embargo esta unidad si posee el nuevo volante con botones, que nos gusta mucho más que el anterior, todo hay que decirlo.
Seguimos notando las suspensiones muy cómodas, con lo que en zona de curvas no aporta toda la sensación dinámica que desearíamos, pese a ser conscientes de lo que es el coche. Comprobamos que los botones del limitador de velocidad y la velocidad de crucero siguen estando lejos del volante, mal situados a nuestro parecer. Lo que si apreciamos es la entrada de USB, que además, carga la batería del móvil realmente rápido.
Seguimos disfrutando de unas plazas traseras enormes y tapicerías renovadas, aunque la calidad es muy similar a las anteriores. La visibilidad trasera no es mala, pero la situación de la tercera luz de freno, en la parte central inferior de la luneta, resta algo de visión. En cualquier caso, apreciable renovación de los grupos ópticos, mucho más llamativos los traseros, que también se abrazan a un rojo intenso casi granate.
Lo que más nos llama la atención, en una ruta que, a priori no se presta para lograr buenos consumos, y donde ‘apretamos’ el coche a conciencia en determinadas zonas, es que el consumo final se estabiliza en 5,4 litros a los 100 kilómetros. ¡Para quitarse el sombrero!
En tercer lugar, por fin, nos ponemos al volante del Dacia Duster EDC 110. Y lo primero que tenemos que decir es que el cambio de doble embrague es lo mejor del coche de largo, y eso que el Duster, que también probamos hace pocos meses, tiene más cualidades que el Sandero, siempre desde nuestro punto de vista.
El cambio automático es suave, silencioso, rápido, cambia de manera lógica y hace que el Duster parezca un vehículo mucho más refinado, práctico y eficaz. Aunque no esté disponible en la tracción 4×4, por las cualidades intrínsecas de este coche, se pueden seguir haciendo cosas fuera del asfalto.
El exterior cambia poco, pero el lavado de cara lo rejuvenece, haciendo que pueda estar unos pocos años más en primera línea aguantando el chaparrón y compitiendo con sus rivales.
Por dentro, lo primero que nos damos cuenta es de que el gran volante panzón de plástico duro no ha cambiado, sigue ahí, con lo que echamos de menos, inmediatamente, el volante del Logan que hemos dejado hace unos minutos.
Con el Duster hacemos una ruta más pequeña, de apenas 40 kilómetros, pero buscamos carreteras en mal estado y lo sacamos un poco de lo negro. La percepción de lo bien que va el cambio lo acapara todo, aunque mientras conducimos también apreciamos que la pantalla del navegador está situada, en la consola central, mucho más abajo que en Logan y Sandero, con lo que es mucho más difícil estar pendiente del mismo. Sin duda urge una recolocación más arriba.
Seguimos teniendo unas suspensiones muy blandas, aumentando la sensación de flacidez con unas ruedas con perfil 65, nada menos, pero apropiadas para los que van a utilizar el Duster en labores off road a menudo. También apreciamos que el depósito de combustible es a la vieja usanza, haciendo necesario introducir la llave en la tapa para abrirlo.
De nuevo disfrutamos de amplitud en todos los asientos y de un maletero que es realmente capaz. Sin duda, una opción muy coherente para el que busque practicidad y no sea el mayor amante de la tecnología.
Sin tener un segundo de respiro, nos hacemos con el Dacia Sandero con el motor gasolina SCe 75, la novedad absoluta de la gama Dacia 2017. El diseño exterior ya está comentado, también el nuevo volante, que nos gusta. Nos centramos en la ruta de unos 30 kilómetros, con bastante tramos urbanos, en la cercana Sibenik, en apreciar el funcionamiento de este nuevo tres cilindros, y más o menos se confirma lo esperado.
Sin ocultar que, para los que solo quieran un coche práctico, para hacer pocos kilómetros, trayectos cortos, y no gastar mucho dinero, es un coche que encaja perfectamente, el tacto del motor es bastante más rudo que el del resto de la familia de cuatro cilindros. También genera alguna vibración más, aunque este no es demasiado importante. Lo más relevante es esa aspereza, tanto a la hora de cambiar, acelerar y buscar la zona media alta del cuentarrevoluciones, donde el ruido se hace más presente sin tener una aceleración acorde al mismo.
El motor estira hasta las 6.500 revoluciones por minuto, momento en el que llega el corte de encendido, marcado de nuevo en una esfera sin zona roja. La potencia es muy justita, pero logra mover un coche que no es muy pesado y que no lleva demasiado peso de tecnología o dispositivos de ayuda a la conducción.
El escalonamiento de las marchas nos parece el apropiado para este motor, aunque siempre se queda algo corto. Será probable hacer viajes largos con el mismo, pero tampoco sería lo más indicado, sobre todo a nivel económico, pues en este breve periplo casi llegamos a los 8 litros de media en consumo.
En definitiva, una gama Dacia con pocos cambios para 2017, donde lo más relevante son el pequeño motor tricilíndrico y el fantástico cambio de doble embrague para el Duster.
Óscar González Soria – oscargonzalez@revistadelmotor.es
hola qiero comprar un coche dacia ligan cambio automático y cuanto vale gracias
Hola, te dejo la web de dacia. Creo que ya no venden el Logan automático. Un cordial saludo
Hola quiero comprar un Dacia Logan MCV automático y llevo esperando dos meses para que me contesten para cuando. ¿Cuanto tiempo hay que esperar para que te den la primera contestación?
Soy de Pozoblanco y me puse en contacto con Puertollano para decirle que lo quiero, pero todavía estoy esperando para cuando lo pueden tener, sin contestación alguna.
Hola Jose Maria, no te podemos ayudar. No tenemos forma de saber cómo va tu pedido ni conocemos los protocolos de venta que aplican en Dacia. Tendrás que ir a tu concesionario a preguntar. Un cordial saludo