A sus 40 años de edad, Mark Webber se despide de la competición oficial después de haber logrado ser campeón del mundo de resistencia y de haber creado un larga carrera deportiva.
El 19 de noviembre será la última vez que veamos a Mark Webber en una competición oficial. El piloto australiano cree que ya ha llegado el momento para colgar el mono y desligarse de la competición oficial. Lo hace tras 18 años en la primera línea del automovilismo. En 1998 un joven piloto australiano irrumpió en la FIA GT Championship y en las 24 horas de Le Mans tras haber pasado por categorías inferiores de monoplazas.
Pero su gran paso al frente se produjo en el año 2000. Arrows contó con él como piloto de pruebas y, un año más tarde, ocupó el mismo rol en Benetton. Su primera temporada como piloto oficial fue en 2002 con Minardi. Los años siguientes estuvo en Jaguar y Williams, pero no fue hasta su fichaje por Red Bull cuando su nombre cobró presencia en el paddock. Tras las temporadas 2007 y 2008, llegó el buen momento de Red Bull, que conoció lo más alto de la F1 en 2010 y años sucesivos. Sin embargo Webber no pudo cumplir su sueño de ser campeón del mundo de F1.
En 2014 se alejó de la Fórmula 1 y regresó al mundo de la resistencia. Junto con Porsche, buscaba su ansiado título de campeón del mundo. Un hecho que ocurrió en las agónicas 6 horas de Bahréin de 2015. Allí, con 39 años de edad, consiguió su primer y único título mundial. El de campeón del mundo de resistencia. Un logro que difícilmente podrá revalidar.
Tras su retirada, Webber mantendrá un papel dentro de Porsche como embajador de la marca. Pero sólo quedan tres carreras oficiales en las que podamos ver y disfrutar de su pilotaje. Con esta retirada, el piloto australiano pone fin a uno de los rumores más comentados, el de formar equipo con Fernando Alonso para disputar con Porsche las 24 horas de Le Mans. Una carrera que, por otro lado, nunca ha podido ganar pese a las dos victorias de Porsche en las ediciones de 2015 y 2016.