El nuevo DS 4 Crossback riza el rizo de la exclusividad en el grupo PSA. El DS4, derivado de lujo del Citroen C4, saca ahora su lado más campero con una versión con carrocería 30 milímetros más alta. Hacemos la prueba del DS 4 Crossback 1.6 BlueHDi 120 Style 6v 5p. ¿Arrancamos?
Vídeo prueba
El DS 4 Crossback pinta bien. Más fachada que contenido, nadie puede negar que es una apuesta interesante viendo el tirón que tienen en los últimos años los SUV y versiones camperas de coches más o menos normales.
Con la exclusividad y el gusto por el detalle por bandera, el DS 4 Crossback no tiene unas capacidades off road específicas más que la mayor altura al suelo, pero seguro que entra más y mejor por los ojos, logrando un buen puñado de ventas del ya elegante y distintivo DS 4.
Esta vuelta de tuerca de DS obedece, claramente, a la tendencia del mercado a vender mucho más fácilmente coches con estética campestre. Si a ello le unimos el salto de calidad del DS 4 con respecto al Citroen C4 y las pocas alternativas que hay en este nicho derivado del segmento C a los Premium alemanes, pues hay bastantes opciones de vender un buen puñado de estos DS4 Crossback, que tienen una estética bastante currada y una imagen más distinguida aún que el DS 4 normal.
El precio final no es mucho más elevado que el escalón inferior, sea DS 4 normal o Citroen C4, con motores y equipamientos parecidos, aunque las correspondencias no son fáciles. Por ese poco más tienes algo más exclusivo y diferente… y ya sabemos que lo diferente, casi siempre, funciona.
Motor, acabados y equipamiento