Toyota ha comunicado un fallo detectado en el Prius (30). El sistema de frenos está equipado con un acumulador de presión. En el interior del acumulador hay una cámara sellada que contiene nitrógeno. Existe la posibilidad de que se pudiera originar una grieta por fatiga del material causada por la vibración durante la marcha del vehículo. Si esto ocurriese, se podría producir una fuga de nitrógeno, que se mezclaría con el líquido de frenos, lo que originaría gradualmente un recorrido más largo del pedal del freno y una disminución de la fuerza de frenado.
Toyota España enviará una carta a los propietarios para que revisen sus vehículos.