Aún más excesivo para Frankfurt.
Brabus ha realizado algunas modificaciones sobre el ya de por sí hilarante Mercedes-Benz Clase G 63 AMG 6X6 para convertirlo en algo monstruoso.
El modelo creado por Mercedes-Benz viene con un motor V8 de 5.5 litros biturbo que produce unos más que respetables 536 CV de potencia máxima. Sin embargo, en BRABUS han creído que no era suficiente para mover a esta mole de 6 ruedas y 3.775 kg de peso.
Por ello han reemplazado los dos turbos por unos creados por ellos mismos cuya principal característica es una mayor compresión del aire. Además el material empleado en recubrir el turbo y los colectores de admisión de aire hacen que el aire llegue a una temperatura más baja. También han instalado unos nuevos catalizadores metálicos de 75 mm quereducen la contrapresión en los tubos bajantes. Finalmente el vehículo ha recibido un nuevo sistema de escape que además de aportar prestaciones aporta un mayor sonido al pulsar el botón «Sport».
Tras todos estos cambios el motor V8 pasa a entregar una potencia de 700 CV a 5.300 rpm con un par motor de 960 Nm entre las 2.000 y las 4.500 rpm. Toda esta potencia y par motor llega a las seis ruedas a través de la caja de cambios AMG SPEEDSHIFT PLUS 7G-TRONIC con levas en el volante.
Dejando a un lado lo técnico está el rediseñado exterior. En BRABUS no han querido hacer nada especial con él y por ello han escogido el mismo kit de carrocería que se oferta para el Mercedes-Benz Clase G. Un kit de carrocería que combina partes en fibra de carbono con partes en aluminio.
Para rematar han creado un habitáculo en el que encontramos cuero acolchado en los paneles de las puertas y el suelo, cuero suave en los asientos y el salpicadero y Alcántara en el techo. Todo ello combinando los colores rojo y negro.
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